Se implementó un sistema de ensacado automático acoplado a un bulldozer para optimizar el llenado de sacos de arena. La innovación reduce el esfuerzo físico, mejora la productividad y cumple con normativas ergonómicas, al permitir el llenado de bolsas sin intervención manual directa y con adaptabilidad a distintos terrenos.

El objetivo principal fue cumplir con normas de ergonomía laboral y la "Ley del Saco", que limita la carga manual a 25 kg, además de aumentar la eficiencia operativa y reducir el riesgo de lesiones. Se busca mejorar el rendimiento diario sin comprometer la salud del trabajador.

La práctica surgió de una experiencia previa en otra obra, fue adaptada con un proveedor externo en un mes. Se diseñó un mecanismo de enganche al bulldozer, con ajustes mecánicos en los sistemas hidráulicos y adaptaciones por el tamaño de los sacos. Participaron operadores, supervisores y equipos de maquinaria.

Los principales desafíos fueron técnicos: ajustes en hidráulica y caída de sacos. Se resolvieron con apoyo del proveedor y rediseño mecánico. Se aprendió la importancia de considerar el bienestar del trabajador en la planificación de procesos y su impacto en la productividad.

Es fácilmente replicable en obras que requieran movimiento de sacos. Se recomienda evaluar si la solución se ajusta a la operación diaria, coordinar con proveedores y planificar mantenimientos. Invertir en soluciones simples puede generar alto impacto en seguridad y eficiencia.